La interiorista catalana Susanna Cots, con estudio en el precioso pueblo de Peratallada en Gerona, firma la reforma integral de esta gran y perfecta casa en el Ampurdán cuyas paredes de piedra han visto pasar ya 300 años… Con sus 300 m2 y un jardín envidiable, esta casa lleva el sello de Susanna impreso en […]
Mi azucarero favorito y una batallita [] My favorite sugar bowl & a story
Muchos seguro ya habréis reconocido este famoso diseño de Herbert Pfeifer para la firma WMF. Hace ya un montón de años, en un viaje a Berlín, lo ví en un escaparate, me enamoré de su diseño práctico y sencillo y me lo compré. De aquella andaba de la ceca a la meca, así que se pasó años guardado en una caja hasta que por fin tuve mi propia casita donde estrenarlo. Por eso es tan especial para mí. Y el caso es que tras varias mudanzas ahí sigue todavía, presidiendo los desayunos en casa todas las mañanas. (En realidad es un bote para la miel, pero de los 4 diseños disponibles -foto inferior- era el que más me gustaba). ¿Que por qué os cuento esta batallita? Porque cuando leáis estas líneas estaré de camino al lugar donde me lo encontré. Also, bis Dienstag!*
I bought the top sugar bowl, a famous design by Herbert Pfeifer for WMF, during a working trip to Berlin, many years ago. It was a time when I used to travel constantly, so the bowlwas kept it in a box for years. As it was the first thing I ever bought for my home, even though I didn’t have one at that time ;), it’s a cherised object for me. Nowadays, it presides our breakfasts and still works like the first day (german way of doing long lasting objects!). And I tell you this little story today, because while you read this, I’m on my way to Berlin…. ;). Also, bis Dienstag!*
*Hasta el martes! [] See you on Tuesday!