Aires africanos y tonos oscuros en Lyon

Hace solo unos días te contaba qué era un apartamento «canut» y hoy vengo ya con el segundo. Estos altos techos, estos muros de piedra, las vistas, la amplitud y en este caso, la extraordinaria transformación de un piso francés a vivienda de aires afro chic, son una absoluta maravilla. O de una vivienda de […]

Pequeñas historias de archivo

Lámpara multiusos · Multipurpose chandelier


¿Te gustaría tener unos portavelas de cristal como los de la foto? Pues no esperes más, aquí tienes las instrucciones:

1. Te compras una maravillosa lámpara vintage y haces que te la envíen desde Alemania (pagar portes es una gozada!)

2. La guardas con todo el mimo posible en casa -un año es suficiente para cogerle cariño- antes de decidir dónde te apetece colgarla… ¿quizá podría venderla? es tan bonita y está tan bien conservada…

3. La cuelgas para probar cómo queda -ya te has dejado las uñas sacando brillo a los cromados- y ver si el nuevo cableado funciona debidamente. ¡Genial! ¡Funciona!

lámpara-techo

4. Ahora, cuidado, viene el paso más importante para conseguir los portavelas: la dejas caer al suelo. De no producirse este paso, es posible que la lámpara siga siendo sólo eso, una preciosa lámpara.

5. Sin derramar una lágrima, recoges los trozos de cristal de la tulipa que se rompe al caer y cuentas hasta 50. En función del cariño que le tengas a la lámpara y de su valor, puedes incluso contar hasta 100.

6. La desmontas por entero, compruebas qué se puede salvar y le sacas una foto. Como no has llorado, no necesitas limpiarte las lágrimas para enfocar de forma correcta. ¿Ves? Todo tiene sus ventajas.

7. En el fondo, hoy estás de buen humor, así que te dices a tí misma/o: ¡pero mira que portavelas más chulos!, mientras sigues contando 50 más.

8. Si tienes un blog, compartes con todos tu torpeza para que se echen unas risas a tu salud. Si no lo tienes, tú te lo pierdes.

9. Por cierto, si alguien necesita repuestos para una lámpara similar, ya sabe cómo localizarme… snif, snif.

lámpara-techo-1
Well, this post is kind of a before & after project. I’m trying to make fun of having broken a wonderful vintage chandelier, brought from Germany, while explaining the whole process (step by step) to convert it in 3 glass candleholders… believe me or not, I didn’t even cry… ok, not very much ;). In case you need some spare parts for a similar lamp, you know where to find me!

Fotos [] Images: Vintage & Chic

12 comentarios

  1. 18 febrero 2009

    Vaya no sé si decir que lo siento o felicitarte.

    Aunque siento que hayas perdido una preciosa lámpara, te felicito por saber encontrar algo bonito entre algo roto y por escribir un post tan divertido.

  2. 18 febrero 2009

    Si la vida te da limones, pues ya sabes, te haces una limonada… Me gustó el post, Leti, viva el sentido del humor!!!

  3. 18 febrero 2009

    JAJAJA¡¡ Me encanta tu blog¡¡

    Otra pregunta volviendo al candelabro de bronce ¿y la limpieza con algún producto específico para metales de los de toda la vida que venden en Mercadona??

    Besos

  4. 18 febrero 2009

    Gracias por los ánimos, Cristina. La verdad es que el rato que me pasé escribiendo el post ya me sirvió de terapia…;)

    Limones te voy a dar yo a tí, Ignatia. ¿te imaginas que repita esto con el resto de las lámparas??

    Pues mira, Desideria, yo últimamente sólo lloro con Hacienda y con la hipoteca…

    Hola ELLE.. ya veo que alguien se está echando unas risas a mi costa. Bien merecido lo tengo. En fin, lo de los productos limpiametales están bien para limpiar superficialmente la plata, el latón o el bronce, pero si hay barnices protectores no los quitan y no consigues limpiar el metal a fondo. En todo caso, depende de cómo esté de sucio lo que vayas a limpiar. Si quieres mándame una foto y te digo qué haría yo…

  5. 18 febrero 2009

    Muchísimas gracias¡¡ Te enviaré foto

    Oye, que me río, pero risa sana. Me encanta las mil vidas que les das a cualquier simple cosa.

    Besitos

  6. 18 febrero 2009

    oooops, todos los dias me doy cuenta de que elegí el camino correcto… el hierro no es quebradizo y si se me abolla lo puedo reparar facilmente, jajaja. pa cristalero no serviria no.

  7. 18 febrero 2009

    Genial, absolutamente genial el relato y el sentido del humor!
    Ahora en serio, ya conoces mis gustos y pasiones: ME ENCANTAN LOS PORTAVELAS!!!! (mas que la lampara I am sorry).
    Como ves tu nueva lámpara de bronce, en nada equiparable a esta, llega en el momento justo como compensación poética

  8. 18 febrero 2009

    Jope, siento lo de la lámpara me puedo imaginar el momento rabia que te ha debido dar. Lo mejor es que has sabido reponerte y darle un uso espectacular.

  9. 19 febrero 2009

    Vaya… Ya lo siento Leti. ¡Que penita! Con lo que a ti te gustan las lámparas vintage…. :'(

  10. 19 febrero 2009

    Espero las fotos, Elle.

    Qué quieres que te diga… gente patosa como yo tiene tendencia a montar pifias con cualquier cosa y un objeto de hierro es mis manos puede ser directamente un arma letal…:)

    Mira, Carolina, me gusta eso de la compensación poética. Sí señor.

    Pues sí, Alicia, rabia… pero sobre todo me quedé como alelada! No era capaz de reaccionar, pero bueno, los portavelas no están tampoco nada mal…

    Fíjate Mejo, que lo que me da pena no es tanto el no tenerla como el que ya no exista… Me da muchísima pena que objetos que tienen ya sus 50 ó 60 años acaben así, sin más… soy una romántica, está claro.

  11. Marce
    13 junio 2010

    Hace un par de semanas me encontre con tu blog, ya no recuerdo como xD, pero me encanta leerlo y me muero de la risa cuando haces comentarios como este de "lamparas multiusos" ja ja ja, el paso mas importante para conseguir los portavelas es dejarla caer al piso, no ja ja que remedio. Me encanta tu blog!





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