La interiorista catalana Susanna Cots, con estudio en el precioso pueblo de Peratallada en Gerona, firma la reforma integral de esta gran y perfecta casa en el Ampurdán cuyas paredes de piedra han visto pasar ya 300 años… Con sus 300 m2 y un jardín envidiable, esta casa lleva el sello de Susanna impreso en […]
Una casa sostenible en un bosque · A sustainable home in a forest
Siempre me ha resultado fascinante oir historias de personas vinculadas a lugares. Yo soy mucho del «uno es de donde pace y no de donde nace» o de que, como los de Bilbao y el chiste, al final uno nace donde quiere… más o menos. Me encantan, como digo, esas historias en las que una persona se enamora de un lugar pero por el motivo que sea, casi siempre porque no es el momento adecuado (ay, el timing, qué invento más puñetero, que ya se sabe que «vale más llegar a tiempo que rondar 100 años»-) esa idea no sale adelante y tienen que pasar lustros, decenas de años incluso, para que ese idilio acabe de cuajar. ¿Cuántas románticas historias de amor con guión parecido habremos leído y visto, verdad? Y todo este prolegómeno para deciros, ya os lo estaréis imaginando, que la de esta casa es una de esas historias. Al parecer, su dueña, vinculada al mundo del arte, se enamoró de este lugar abierto al pacífico durante un viaje de juventud: las islas Orcas en el estado de Washington, a dos pasos de Canadá. Tuvieron que pasar 40 años para que volviera a pisar este lugar y se diera cuenta de que, efectivamente, aquél sueño de juventud tenía sentido. Así que se compró un trozo de tierra en pleno bosque, llamó al estudio de arquitectura Gary Gladwish Architecture y, con materiales reciclados o de bajo impacto medioambiental (la madera procede de una antigua granja demolida), hizo su nuevo hogar. Esta casa-cabaña sostenible con unas vistas difíciles de igualar. Tenéis más info, como siempre, en los enlaces del final. · This is one of this love stories between a person and a place that I’m always so keen to know about. It seems that the owner of this beautiful home in the Orcas Islas, open to the Pacific and very close to Canada, visited this place for the first time 40 years before her second trip, when she finally decided to purchase a forested piece of land to build her home there. On this task, she counted on the help of Gary Gladwish Architecture. On the architects words: «Throughout her life rocks, nature and landscape played an important role in her artwork. It was this attraction that convinced her that this was the perfect site. She requested an open, simple, low maintenance design which works with the site in such a way that her views of the island, forest and ledges were always present within the house». This story reminds me somehow these very romantic stories of first loves and second chances, decades later…
Fotos · Photos: Gary Gladwish Architecture via Ignant
Me encanta ese trozo de bosque dentro de casa. Increible!